Presencial y Online
Facilitadora: Samai Mujer Medicina
El síntoma (físico, emocional, mental, espiritual) es la voz del alma pidiendo se ponga atención a desórdenes generados en el sistema de creencias… y las emociones que se generan como consecuencia. Si liberamos la emoción, transformamos el programa de interpretación que se ha estado usando … y si esa ‘plantilla’ se transforma, la influencia en el cuerpo físico también se transforma.
El cuerpo físico es un noble compañero de viaje, que nos permite ‘vehiculizarnos’ dentro de la experiencia humana. Y sin embargo, su servicio no es únicamente contenernos y transportarnos dentro del mundo, sino también acompañarnos a desarrollar el arte de reconocer-nos mejor, desde nuestras profundidades, para así poder mirar los temas que acarreamos como pendientes disarmónicos en nuestra evolución.
Por diversos mandatos socio-culturales, es común que desde niñ@s aprendamos a reprimir las emociones que el entorno considera inadecuadas. La energía emocional no tiene la cualidad de auto-disolverse, requiere de que abramos la válvula de liberación para des-estancarse y fluir…. y si no nos concedemos esa posibilidad, se acumula dentro del cuerpo, obstaculizando el flujo de ki (energía, conciencia). Estudios extensivos a través de los años (que mucho tienen que ver con la experiencia de personas dedicadas al hacer terapéutico) han demostrado que determinadas energías emocionales se acumulan en determinados tejidos físicos, y sobre esa base de la ‘pólvora ya descubierta’ se nos facilita enormemente la diferenciación.
El cuerpo físico entra en el servicio amoroso de hacer síntomas únicamente cuando no escuchamos las alertas del alma oportunamente. Y claramentecorazón, cuando el cuerpo físico entra en acción para la toma de conciencia, se reduce considerablemente la posibilidad de desentendernos…, porque el síntoma nos molesta, nos duele, nos amenaza, etc.
Este taller está orientado a re-cordar*el buen arte de usar el síntoma como hilo conductor para guiarnos a mirar la raíz de las disfunciones, y así atenderlas y resolverlas desde la raíz…, ya sea para nosotr@s mism@s o para acompañar a otras personas desde el hacer terapéutico. Vemos también algunas rutas/estrategias para resolver los bloqueos.
*(re=de nuevo, cordis=corazón…, volver a mirar-nos con el corazón)